ESTAMPAS BILBAÍNAS
PROTECCIÓN Y COBIJO PARA LOS AMIGOS DE LA MONTAÑA
El Ayuntamiento de Bilbao construye un pequeño refugio en el Pagasarri que se hace muy popular entre los aficionados al montañismo. Una ligera indisposición impide al alcalde Ricardo Power inaugurarlo.
1915
Medio millar de montañeros, al abrigo en el Pagasarri. Este albergue de los amigos de la montaña queda al cuidado del Club Deportivo, «orientado por un excelente organizador de la enseñanza física y la vida deportiva, como es Antxon Bandrés».
El consistorio alienta el afán de los deportistas por alcanzar la cumbre bilbaína. El albergue sirve para incrementar el número de practicantes de un floreciente montañismo con el que se pretende alejar a la juventud vasca «de la vida enervante y poco sanitaria de las ciudades, en las que va perdiéndose la simpatía y sencillez de las vigilias vesperales del domingo», en palabras del alcalde Power.