Parque lineal del Nervión

En el corazón de Ayala.

El río Nervión es más que la mayor cascada de España. Es la columna vertebral del Valle. Este paseo por sus orillas, desde Llodio a Amurrio, invita a conocer torres, molinos y puentes medievales y comprobar que aún saltan los barbos.

Corredor fluvial. Otra mirada

El río ha sido clave para el desarrollo de la industria y el sector agrario del Valle y durante años no fue bien tratado. Poco a poco ese corredor fluvial recupera su vida salvaje. Acérquese a sus orillas y disfrute de bosques de ribera de fresnos y robles y de los vuelos de las garzas reales, la garduñas, de diferentes tipos de anátidas y quién sabe si de noche y en silencio atisba algún visón europeo. Si se queda con ganas de agua, cerca están el cañón de Delika con su salto de 270 metros o el embalse de Maroño.

Un paseo por la historia. Molinos y puentes

Da igual por donde empiece el andarín o el ciclista esta ruta de 10 kilómetros. En cuestión de metros ya se habrá topado con algún puente medieval o alguna pasarela más moderna –Olako, Zabalibar, Zamora, Markijana, Zubibarrio, Olarte, Otazu o Gardea–, con los restos de molinos o con alguna de esas torres ayalesas declaradas conjunto monumental y que hacen viajar al siglo XVI, a esas guerras de linajes y bandos entre los señores del Valle.

Una caja de sorpresas. Luiaondo

Este paseo no da tregua a la curiosidad. La vista no se aburre. Va de la paz del agua, a la tranquilidad del bosque o a la seguridad de los puentes. Encuentre una ferrería, iglesias, ermitas, el Árbol de Malato, una cruz, el museo del licor, parques, montes y todo un casco histórico. ¿Se puede tener un tour más completo y gratis?

1. Cruzamos el río por la primera pasarela roja metálica y seguimos en la misma dirección por la otra orilla. Durante Los siguientes kilómetros deberemos cruzar el río en varias ocasiones.
   
2. Entrando en Luyando (Ayala) volvemos a cruzar el río por otra pasarela roja y nos acercamos a las casas del pueblo. Recorremos las casas y cruzamos el puente Zubibarri, siguiendo nuestra ruta hasta el apeadero de Luyando.
3. Llegamos a una pasarela de grandes dimensiones. La atravesamos para llegar a la otra orilla del río.
4. Llegamos al apeadero de Salbio.
5. Llegamos al barrio de Olako. Fin del recorrido.