MODERN EXPRESS

Su última aventura

Ruta del Modern Express hasta llegar al puerto de Bilbao

26 de enero

La tripulación es rescatada ante la escora del buque en medio del temporal.

La tripulación es rescatada ante la escora del buque en medio del temporal

28 de enero

Vientos de 74 km/h y olas de nueve metros empujan al 'Modern Express' hacia costas francesas.

Vientos de 74 km/h y olas de nueve metros empujan al 'Modern Express' hacia costas francesas

30 de enero

Rescatadores profesionales sobrevuelan en barco.

Rescatadores profesionales sobrevuelan en barco

2 de febrero

Expertos en rescate consiguen subir al 'Modern Express' y tender un cable al remolcador.

Expertos en rescate consiguen subir al 'Modern Express' y tender un cable al remolcador

3 de febrero

El 'Modern Express' atraca en el puerto de Bilbao.

El 'Modern Express' atraca en el puerto de Bilbao
Características del 'Modern Express'

Modern Express

  • Eslora: 163 metros
  • Tipo de embarcación: Mercante ro-ro
  • Tripulación: 22 marineros filipinos

El barco estuvo a punto de considerarse insalvable y condenado al hundimiento. Pero esta tragedia se evitó.

El 'Modern Express' volvió a navegar el 20 de septiembre y puso fin a una aventura que comenzó en enero, cuando la tripulación perdió el control de la nave y la abandonó a su suerte en el Golfo de Bizkaia, en medio de un fuerte temporal. Su rescate fue un momento épico, en el se consiguió evitar el hundimiento cuando ya parecía que el barco se iba a estrellar contra las costas francesas. Su última ruta, sin embargo, es la de un barco herido de muerte. Su salida del puerto de Bilbao fue remolcado y con un destino definitivo: ser desguazado en el puerto turco de Aliaga.

Así fue el rescate de los 22 tripulantes del 'Modern Express'

El final del 'Modern Express' se empezó a escribir el 26 de enero. Ese día, en medio de un fuerte temporal que azotaba el Golfo de Bizkaia, el navío se encontraba a 370 kilómetros al norte del gallego cabo de Ortegal, en aguas británicas. Este gigante de 160 metros de eslora se escoró sin que la tripulación pudiera hacer nada para evitarlo. En unas horas, el 'Modern Express' se inclinaba 40 grados y se convertía en un navío sin ninguna capacidad de maniobra, azotado por olas de hasta nueve metros de altura y vientos de 74 kilómetros por hora.

Francia inició con éxito el remolque del 'Modern Express'

El barco transportaba 3.600 toneladas de madera y maquinaria pesada, principalmente, grúas y excavadoras. Había zarpado de Gabón y su destino era el puerto francés de Le Havre. El 26 de enero esa ruta ya no era posible. El capitán envió una llamada de socorro a las autoridades británicas, que transfirieron el aviso a Salvamento Marítimo español, cuyos medios de rescate se encontraban mucho más cerca. En ese momento, el temor era que el barco volcase y se fuera a pique, dejando unas mínimas opciones de supervivencia a los 22 tripulantes del buque, todos ellos filipinos. En una intervención de urgencia, un helicóptero de Salvamento Marítimo y otro de la Xunta de Galicia consiguió evacuar a toda la tripulación.

'Modern Express' remolcado en alta mar

'Modern Express' remolcado en alta mar Ver galería completa

En los siguientes cuatro días, el navío fue arrastrado por los fuertes vientos del Oeste hacia Francia. El 30 de enero, cuatro días después, el barco fantasma se encontraba ya a unas 300 millas de las costas de Las Landas. La Prefectura Marítima del Atlántico, con sede en Brest y dirigida por el vicealmirante francés Emmanuel de Oliveira, puso en marcha una operación para intentar controlar la situación. En ese momento el mayor temor era imaginario. La idea de un barco gigante a la deriva era inseparable de la catástrofe del petrolero 'Prestige', cuyo hundimiento en 2002 provocó una catástrofe medioambiental en el Cantábrico. En esa atmósfera de temor, el propio vicealmirante de Oliveira ofreció una rueda de prensa para calmar la situación. «No tiene sentido comparar el 'Modern Express' con el 'Prestige'. El petrolero llevaba 77.000 toneladas de crudo mientras que el carguero a la deriva contiene 300. No existe el riesgo de marea negra», tranquilizó el alto oficial galo. De forma paralela, los armadores del buque ya habían contratado a la empresa SMIT Sauvage, quizás, la mejor firma del mundo a la hora de superar situaciones imposibles en el mar. Entre sus méritos se encuentra, por ejemplo, el haber sacado del fondo del mar al 'Kursk', el submarino atómico ruso hundido en 2000 en el mar de Barents.

El 'Modern Express', desde el aire

«No tiene sentido comparar la situación del 'Modern Express' con la del 'Prestige'. No existe el riesgo de marea negra»

Los expertos holandeses sobrevolaron el Modern Express el 30 de enero a bordo de un avión aduanero francés. El 2 de febrero, cuatro miembros de SMIT Sauvage consiguieron descolgarse de un helicóptero y llegar hasta la cubierta inclinada del 'Modern Express'. Previamente, se habían intentado distintas faenas de remolcado, pero todas habían fracasado. Ese día, sin embargo, los técnicos holandeses consiguieron tender un cable entre el buque a la deriva y el remolcador 'Centaurus'. Tras ese éxito, las autoridades marítimas francesas comenzaron a barajar distintos puertos seguros del Cantábrico. La búsqueda se centró en tres destinos: La Rochelle, Bilbao y Gijón. En ese momento el temporal había amainado pero las previsiones eran que un nuevo frente entrase en el Golfo de Bizkaia. Según los partes meteorológicos, las olas de más de nueve metros podían volver de un momento a otro.

El 'Modern Express' se inclinó hasta 43 grados

El 'Modern Express' se inclinó hasta 43 grados Ver galería completa

Bilbao fue finalmente el puerto elegido para salvar el navío. El remolcador enfiló hacia el Sur. Tardarían más de 24 horas en recorrer las 40 millas que les separaban de su destino. El 3 de febrero, el 'Modern Express' se encontraba ya a solo diez millas de la costa vizcaína. En ese momento, la empresa SMIT solicitó que se detuvieran los remolcadores. Si hubieran seguido avanzando, la entrada por la bocana se habría producido de noche, una maniobra arriesgada por la falta de visibilidad. Incluso en algunos momento, la deriva estuvo a punto de causar una colisión con el rompeolas del muelle. El objetivo era entrar de día, cuando la luz natural permitiera realizar la tarea en condiciones mucho más seguras.

Finalmente, el 3 de febrero el 'Modern Express' atracaba en Bilbao. Los holandeses de SMIT Sauvage tardarían todavía veinte días en eliminar la escora del buque. Por primera vez, el 'Modern Express' parecía un barco de verdad y no un navío a punto de irse a pique.

Así fue la difícil maniobra de acceso del 'Modern Express' al puerto de Bilbao

Desde esa fecha hasta el momento de su partida, los armadores, las compañías de seguros y los destinatarios de la carga estuvieron negociando qué hacer con el contenido de las bodegas y el buque. Finalmente, el 19 de abril, la compañía iniciaba el vaciado del 'Modern Express' para que la carga se trasladase por carretera hasta su punto de llegada. Una carga, por otra parte, que se encuentra bajo investigación después de que el Gobierno de Gabón denunciase que la madera podría haber sido obtenida de forma irregular, sin respetar las leyes medioambientales locales.

El 'Modern Express', en el puerto de Bilbao

Imagen de la carga desplazada en las bodegas del 'Modern Express'

Imagen de la carga desplazada durante el temporal en las bodegas del 'Modern Express' Ver galería completa

Las primeras imágenes del interior de la nave, publicadas en exclusiva por EL CORREO, insinuaban la explicación de cómo empezó la desgracia del carguero. Las fotografías mostraban unas grúas volcadas y tumbadas contra una de las paredes del caso. Según los expertos, la teoría más pausible sostiene que la maquinaria pesada volcó dentro del buque por culpa del temporal y desestabilizó al 'Modern Express', que comenzó a escorar. El temporal y el resto de la carga mal estibada se encargaron del resto. El daño que sufrió el barco ha llevado a la compañía ha considerar el desguace como la opción más económica frente al gasto que supondría una reparación ante los daños sufridos. Hoy inicia un periplo que finalizará en Turquía, en el puerto de Aliaga. Allí, el 'Modern Express' pasará a la historia y será desguazado pieza a pieza. El Golfo de Bizkaia marcó su final.

El 'Modern Express', rumbo a Turquía